Hoy es un buen día para iniciar algo nuevo.

Tiene más de un año y medio que ya no escribía algo que no fuera mi diario, (traducción: mi libreta de $10.00 pesos que rueda por todo mi cuarto, porque en él si escribo seguido). La necesidad me llego hace poco, cuando me invitaron a participar en una mesa de lectura; al principio pensé que era buena idea, pero al final tome la decisión de no participar porque no he escrito nada, NADA, que no sea referente a mi vida, y obviamente no me iba a poner a leer mi diario frente a desconocidos y escritores que ya tienen un camino recorrido, por eso  rechace tajantemente  la invitación y por  otra cuestión que no haré mención. 

Me ha hecho mucha falta, porque de repente me pongo a pensar en un montón de ideas  que en mi cabeza suenan geniales, pero que  no consigo plasmar en un papel por la pereza  y la poca o nula inspiración real de escribir, como consecuencia de esta nueva regeneración de  mi persona hacia la escritura, me di a la tarea de leer mis últimos escritos, son un total y completo fiasco, no sé qué estaba pensando, creo que la Normal aplasto de lleno mis sueños, aspiraciones y grandezas.  ( Te he fallado Jorge I.)


Además, llama mi atención  el hecho de medirme conmigo misma, con la Sol de hace dos años, ¿seré capaz de escribir?,  ¿madure un poco en mi persona como para no escribir de lo mismo?, esa es la duda que quiero disipar y que tiene días que me carcome por dentro, por el momento aprovecharé esta racha de medianas ganas de escribir. 

Si he madurado.

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