Estaba viendo una película en la cual el protagonista comienza a sentir cariño por una chica que siempre ha estado enamorada de él desde que eran niños, pero nunca se había dado cuenta de lo sentimientos de ella hasta que por accidente entró a sus recuerdos. Como la hermana de ella había sido secuestrada por seres desconocidos, van en su búsqueda junto con otros amigos en una misión de rescate, a ellos les toca formar una pareja para investigar una ciudad en ruinas, donde podía estar la hermana secuestrada, recorriendola suben a lo mas alto, donde existe un mirador. Los dos se encuentran mirando el horizonte, la chica se encuentra perdida en sus pensamientos, mientras que él de repente la ve de reojo y se da cuenta que nunca había visto a nadie igual que ella, era hermosa, era lo mejor que le había pasado, incluso queda boquiabierto y cuando ella nota su mirada, él se voltea rápidamente fingiendo ver a otro lado.
Claramente se había enamorado.
Me llamó mucho la atención esta escena porque antes de que yo tuviera un sentimiento similar al del chico, siempre había pensando que eran una tontería esas escenas de película o de caricatura, donde ven a la persona que les gusta o de la que están enamoradoscomo un ángel caído del cielo, como la perfección hecha persona, como un ser de otro planeta que no puedes creer que este a tu lado, para mí era ridículo, exagerado, tonto y que eso no pasaba. Pero yo no creía en ello porque nunca lo había sentido. Y cuando me paso (la primera vez) se detuvo literalmente el tiempo. Yo ya sabía que me gustaba, pero no sabía cuánto me podía gustar y una tarde me lo hicieron ver.
Íbamos en su auto por la carretera, y la luz del atardecer chocaba de mi lado, como a mi siempre me ha gustado ir viendo por la ventanilla, la baje y el aire comenzó a revolverme el cabello, justo cuando pasamos por un corazón enorme que estaba (y esta) pintado en una casa, gire hacía su lado para acomodarme el cabello, cuando en ese instante paso. Lo vi, el tiempo se paro, fue como si el atardecer le hubiera sentado de maravilla en su piel, su cabello castaño que brillaba con unos reflejos rojizos, tenía puesto una chaqueta azul con el cuello alto, no sé cuánto me quede viéndolo, si fue mucho o poco, no sé si él se dio cuenta, pero quede pendeja.
Lo tengo grabado como una de los recuerdos mas preciosos que mi mente puede guardar, es más, por ser el primer momento en me que paso algo así, le tengo un cariño a ese recuerdo, que a veces lo rebobino no´mas para que esa sensación la vuelva a recorrer mi cuerpo. Y no es que aún sienta algo por esa persona, mas bien "eso" que paso es la que me gusta revivir.
La segunda ocasión que me paso, ya fue algo mas reciente, fue como al mediodía, nos bajamos a comprar chucherías a una tienda, hasta allí iba todo bien, (la verdad no esperaba que me sucediera de nuevo y tan así de repente), como la tienda quedaba de su lado del auto, tuve que rodear el carro para ir hacia él. En el momento en que se baja y camino unos cuantos pasos volví a sentir algo parecido a la anécdota anterior, llevaba una chamarra azul, sus tenis que tanto le gustaban y lentes oscuros. A comparación de la anterior, en esta ocasión tontamente suspire profundamente, quedandome con la boca abierta unos segundos y como si no era suficiente, los pies se me clavaron en el suelo, desperté del coma porque unos chicos pasaron por ahí gritando.
Como las dos cosas me han pasado con dos personas distintas, en la primera era extremadamente joven y la segunda fue de adulta, no puedo decir cuál es mas mejor que la otra, sin embargo estoy contenta de que esa última sensación aún no se me ha ido.
*Ya voy a tratar de creerle mas a las películas.
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| Así mero me puse. |